Una de las consecuencias del desplazamiento del eje de la Tierra es producto de la pérdida  de hielo como consecuencia del cambio climático, un estudio de la Nasa en Pasadena se calculó que durante el siglo veinte el eje de la Tierra de desplazó 10 cms por año es decir unos 10 metros en cien años, una de las causas de esta alteración es la pérdida de masa de hielo en zonas polares, principalmente en Groenlandia. En general la redistribución de la masa sobre y dentro de la tierra, las capas de hielo, los océanos y el flujo de manto, afecta la rotación del planeta, pero la disminución notable de hielo en Groenlandia es uno de los principales contribuyentes de la masa que se transfiere a los océanos, lo que provocó un aumento del nivel del mar y en consecuencia una deriva en la rotación de la tierra.