La posición de Venezuela geograficamente hace que su territorio participe de las mayores proporciones de energía que el sol transfiere a la tierra, cerca de la superficie en la zona tropical se desarrollan vientos provenientes del noreste y del sureste denominados alisios, los mismos soplan en casi todas las regiones tropicales que se extienden de los cinturones de altas presiones subtropicales y las bajas presiones ecuatoriales. En el hemisferio norte el aire que se dirige hacia el Ecuador es desviado hacía la derecha por la fuerza de Coriolis y forman los alisios del noreste, de la misma manera, en el hemisferio sur la desviación hacía la izquierda origina los alisios del sureste.
Cuando el aire se acerca al Ecuador, los vientos alisios del noreste y sureste convergen sobre una estrecha zona a lo largo de él, denominada Zona de Convergencia Intertropical, estos vientos obligan al aire cálido ecuatorial a elevarse, este movimiento ascendente provoca un enfriamiento del aire por expansión que favorece la condensación y por ende el desarrollo vertical de nubes y la inestabilidad se extiende a mayores altitudes, originando precipitaciones fuertes y frecuentes.
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